
Mucho antes de ser iceberg errante
vagando perdido sin rumbo ni destino
por el tenebroso océano de tu ausencia,
recuerda querida musa de la niebla
que un día no tan lejano en tu memoria
fui algodonosa nube blanca
sombreando el infinito mar de tu mirada.
¿Y en esta errática deriva
de incierta latitud silente,
acabará el fuego de mi corazón
derritiendo el solitario presidio helado
donde retienes callado todo tu amor?
Mucho antes de ser vencida rama desnuda
azotada en los melancólicos atardeceres
por el duro viento del olvido,
acuérdate querida musa de las estrellas
que una noche aún cercana en tu alma
fui sin duda amado brazo florido
agarrado al seguro tronco de tu cariño.
¿Y en este eterno otoño
de ajadas palabras caducas,
volverán alguna vez más
tus perdidas primaveras
a florecer mis secos retoños?
Bellas letras mi querido Tomás y definitivamente, antes de ser...ERES.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Bueno, esto si que no me lo esperaba, ver algo de ese tal acróbata por aquí.....pues de las letras no voy a comentar nada....ala que se chinche el autor y de verlo por aquí.....que gracias Susanita, me siento muy honrado y ya me espero cualquier sorpresa tuya, si alguna vez vienes por Águilas no hace falta que me avises, te vienes directa a mi casa que es la tuya y seguro que no me sorprendes tanto como hoy...jajajaj
ResponderEliminarUn beso y mi eterno agradecimiento por poner mis letras en tu espacio....para mí todo un honor.